Helena Rubinstein

Helena nació en 1872 en una familia judía en Cracovia (Polonia) y allí para luchar contra el viento que destrozaba su cara utilizaba unas pomadas que preparaban  unos amigos suyos. Les pidió la formula y  empezó a fabricarla y venderla entre sus amistades. En 1902 vivi3endo en Australia, abrió en Melbourne el primer salón de belleza de la historia y tres años después tenia una fortuna de la época 100.000 dólares.

Volvió a Europa, se caso con su publicista y en 1908 abrió en Londres su primer  salón de belleza-tienda que volvió locas a las inglesas. Ella fue la descubridora de los tres tipos de pieles femeninas: normal, seca y grasa, y que cada una de ellas necesitaba un tratamiento especifico. Pronto siguieron las mascaras contra el acné, el tónico facial, la crema de noche.

En 1912 se trasladó a París donde divulgó extensamente el lápiz labial. Colette era su promotora, Coco Chanel la invitaba a sus fiestas y Marcel Proust le preguntaba como se maquillaban las damas para después contarlo en “La búsqueda del tiempo perdido”. Fue amiga de Picasso y de Renoir. Su colección privada tendría de todo: Miro, Dali, Modigliani, Matisse, Gris, Rouault.Creó una cadena de institutos, fábricas y laboratorios de cosmética en las grandes ciudades como Londres (1908), París (1915), Nueva York (1917), Tokyo (1956).

Con la guerra en el horizonte  se traslado con su marido a USA y allí empezó su batalla campal con Elizabeth Arden, que  contraatacó llevando sus productos a Europa. Al tiempo ambas divas de divorciaron de sus maridos originales y los cambiaron por un principie georgiano (Helena) y otro ruso (Elizabeth). Y se rodearon de joyas. Se decía que eran superiores a las de la propia reina de Inglaterra. Se odiaban y se robaban a los mejores empleados y cada una decía de la otra lo mismo: esa horrible mujer. Después de la guerra Helena volvió a Europa y  le devolvió los colores a un continente gris y triste.  Ambas también designaron como herederas a sus respectivas sobrinas: Pat Young de Elizabeth Arden y Mala Rubinstein de Helena Rubinstein.

Helena murió en Nueva York en 1965 de un trombosis a los 93 años. La  encontraron en su despacho, donde, a pesar de su edad,  iba cada día. Elizabeth Arden la sobrevivió 18 meses y también hallo la muerte en su despacho con más de 90 años.

La última biografía conjunta, que se ha escrito de las dos, las describe como implacables tiranas y mentirosas compulsivas, aunque se rinde ante la genialidad y el poderío de ambas.

En España Helena Rubinstein, como Giorgio Armani o Lancôme pertenecen al grupo L’Oreal